El aljibe es una antigua forma de almacenar el agua que procede de la lluvia recogida de los tejados de las casas o el agua de pozo canalizada hasta él. Suele estar construido con ladrillos y su historia nos lleva a los territorios del Imperio Romano donde el clima era semiárido, como en la península ibérica y la península Itálica, y por tal razón se construyeron grandes depósitos subterráneos donde el agua de lluvia se iba almacenando para su posterior consumo, humano o agrícola. Pero también los aljibes nos recuerdan los libros de cuentos ilustrados o los libros de textos de la escuela, donde casi siempre había un aljibe con su magia a la espera de humedecer nuestras almas.
Sin embargo, ha habido crónicas tétricas relacionadas con asesinatos y o robos donde la víctima o el motín o las pruebas habían sido arrojadas a esos depósitos. ¿Será que en algunas mentes el agua todo lo limpia? ¿Será que la oscuridad de la mente se emparenta con la negrura del aljibe en su profundidad?
Como sea, no hay nostalgia en el balde sostenido por la cuerda o en el brocal de mampostería o en la alzada de hierro forjado, alzada realizada por herreros que mucho sabían de la belleza. Llega a mi mente una antigua anécdota de un muchacho en un boliche bailable de mitad del siglo pasado que se entretuvo demasiado en el baño y para cuando quiso acordar el boliche cerró sus puertas sin reparar que aún había un cliente adentro del mismo. El cliente quizá mareado pro la soledad y la noche se coló por la ventana hacia el patio lindero, parece que la Luna no fue su aliada, y la noche cerrada como la incógnita no lo ayudó para ver bien y tuvo la infeliz idea de saltar la medianera hacia un patio lindero que oh casualidad tenía un aljibe a la vera de la pared. De negrura en negrura, sin previo aviso terminó pidiendo auxilio con desespero y apenas sostenido por la cuerda. Los bomberos asistieron al muchacho que según cuentan fue la peor mojadura de su vida. El agua y la oscuridad no son amigos, eso parece. Como sea, desde que el mundo es mundo, las nostalgias tienen que ver con lo mejor que nos sucede hasta nuevo aviso. Lo demás es puro cuento…