Clint Barton, alias Hawkeye, es uno de los miembros fundadores del grupo The Avengers, los “héroes más poderosos de la Tierra”, y fue uno de los responsables de salvar al planeta —y el universo—en más de una ocasión. Pese a la fama que ostenta, el hombre no se considera un héroe sino un arma, entrenada con eficiencia en el arte del arco y flecha, combate cuerpo a cuerpo e investigación. Su última aventura lo llevó por territorios oscuros cuando la mitad de todo ser viviente en el cosmos desapareció por obra y gracia del titan loco Thanos, y entre aquellos que se desvanecieron en una nube de polvo, estaba su familia.
Aquellos cinco años que duró la ausencia de estas personas Barton pasó por su momento más oscuro. Abandonó el manto de su viejo alter ego y lo cambió por el de Ronin, un vigilante armado con una espada retráctil, encargado de aniquilar cuanto grupo mafioso se le cruzara a lo largo y ancho del globo.
La capucha y máscara le permitieron mantener cierto anonimato, pero en el camino hizo muchos enemigos, incluida una pequeña chica sordomuda y con una pierna prostética, quien vio como asesinaban a su padre, un peón de una agrupación criminal, a manos de este vengador. Echo, como se haría conocer más tarde, dedicaría sus días, recursos y habilidades en encontrar al responsable de su orfandad, armando un pequeño ejército de criminales de poca monta provenientes de Europa Oriental.
Al mismo tiempo, la pequeña Kate Bishop fue testigo “privilegiada” del ataque a Nueva York en el 2012, cuando los alienígenas comandados por Loki intentaron tomar la ciudad. La pequeña alcanzó a ver cómo un hombre armado con un arco y flecha se trenzaba en una lucha feroz con enemigos que lo superaban claramente. La chica no consiguió ver el resto de la escaramuza, pero aquella imagen del héroe lanzándose al vacío desde la cornisa de un edificio tirando flechas quedó impresa en su memoria, y desde entonces se convenció que, de adulta, sería una superheroína utilizando las mismas armas que su ídolo.
En el presente —al menos de la línea temporal de las películas y series de Marvel— Clint Barton está con sus hijos disfrutando de un pequeño receso en Nueva York antes de volver a su hogar campestre para celebrar navidad. Asisten a un musical ridículo basado en las aventuras de los superhéroes, pero no resisten más de medio espectáculo por la vergüenza ajena que sienten. Lo que parecía ser unas vacaciones alejadas de todo tipo de cuestiones heroicas se ve interrumpido cuando escucha que alguien tiene posesión de su viejo traje de Ronin, y que lo está utilizando para pelearse con malhechores.
Es así como Kate Bishop, ahora de veintidós años de edad, cruza su camino con Hawkeye, y en un minuto terminan siendo compañeros —muy a pesar del hombre al principio— con el fin de derribar al grupo mafioso comandado por Echo, y sobre todo su misterioso jefe, un villano que nadie nombra en voz alta pero que todos los fanáticos del Universo Cinematográfico Marvel estaban esperando hace varios años. Hawkeye irá moldeando las asombrosas habilidades de su compañera, mientras intenta poner fin a la era de Ronin, acabar con todos los enemigos que le quedaron del pasado y así mantener a su familia a salvo.
Hawkeye está protagonizada por Jeremy Renner como el héroe titular; Hailee Steinfeld asume el rol de Kate Bishop y también cuenta con la participación de Linda Cardinelli como Laura Barton, Alaqua Cox en el papel de Maya Lopez/Echo, que tiene el honor de ser la segunda actriz sordomuda en obtener un rol en la gigantesca franquicia cinematográfica y televisiva. Vera Farmiga encarna a la madre de Kate, Eleonor Bishop, quien tomó las riendas de la empresa de seguridad de su difunto marido y padre de la pequeña.
La serie fue creada para televisión por Jonathan Igla, y basó su argumento y estilo visual en una multipremiada saga de historietas titulada Hawkeye: mi vida como un arma, escrita por Matt Fraction y dibujada por David Aja. El escritor, de hecho, trabajó en esta versión televisiva como consultor, y, desde el primer capítulo, quienes hayan leído los veinticuatro números de la historieta encontrarán no sólo referencias sino secuencias trasladadas de la viñeta a la pantalla con una fidelidad asombrosa.
Renner tiene más espacio que nunca para sacar a relucir su dotes de actor, otorgándole mucho peso dramático a un personaje que, a menudo, quedaba relegado entre los fanáticos por no ser tan “pintoresco”. Hawkeye no tiene poderes sobrehumanos, es sólo un hombre con un arco, muchas flechas y una puntería excepcional. También es un héroe dañado por haber sobrevivido a batallas épicas: los huesos le duelen, ha perdido la audición y debe usar audífonos, y su único anhelo es llegar a tiempo para festejar con su familia. No le interesa la exposición pública, la fama, ni quiere ser el modelo a seguir de nadie. Los fantasmas lo persiguen desde sus días más oscuros, por eso él no se considera un héroe sino un arma, un soldado bien entrenado.
El contraste es perfecto con la joven Steinfeld, una actriz en ascenso de personalidad magnética, adorable y también bien entrenada en el arte de la batalla cuerpo a cuerpo. La muchacha le da vida a un personaje repleto de energía, apasionada en su carrera por convertirse en una heroína con todas las letras, y siempre con un chiste en la punta de la lengua para descomprimir las situaciones más tensas.
Esta nueva Hawkeye es un cambio de paradigma casi completo del personaje, mucho más enfocada en darse a conocer al mundo más que mantenerse en las sombras como su mentor, más feliz de poder asumir el rol de heroína y con todas las intenciones de poder ser una Vengadora como su ídolo.
Hawkeye destila espíritu navideño en cada episodio, que funciona como una cuenta regresiva hasta la noche buena. Mientras Clint ve como los días avanzan, las cosas se complican, los villanos a derrotar crecen en número y poder. Su esposa comprende que estar casada con un héroe reconocido en todo el planeta tiene como consecuencia este tipo de contratiempos. Los directores se encargaron de matizar las escenas de acción con drama, misterio y mucho humor, una de las marcas registradas de la casa.
A esta altura de la franquicia es casi una redundancia decir que para entender esta serie es necesario haber visto, por lo menos, todas las películas de The Avengers, más otras películas en solitario de los superhéroes, ya que en esta fase cuatro de Marvel todo está conectado, y este tipo de producciones tienen muchos guiños visuales y de diálogos que recompensan a los espectadores más minuciosos.
La serie consta de seis episodios, todos de menos de una hora a excepción del que se estrenará mañana, el último, cuya duración aún no fue confirmada pero si se sabe que va a ser el más largo de todas las series que estrenó Marvel hasta la fecha.
La productora ya anunció que se está trabajando en una serie derivada de esta, que se concentra en el personaje de Echo, lo cual marcaría el histórico debut de una actriz sordomuda como protagonista absoluta de una serie.
Hawkeye es una serie de acción, misterio con toques de comedia que no sólo recompensa a los fanáticos que siguen esta enorme historia desde el 2008, sino que se deja ver para aquellos espectadores casuales. Tal vez estos no entiendan todas las referencias, pero tanto los directores como los actores se encargaron de crear un producto accesible, entretenido y que permite conocer más a fondo a uno de los personajes “secundarios” más importantes del universo Marvel.
La mini serie se encuentra disponible en Disney +.