El cine y la televisión no se llevan bien con los videojuegos en líneas generales. Por cada Arcane o La serie de Cuphead hay unos cincuenta Super Mario Bros. La Película o Doom, protagonizada por un joven Dwyane “The Rock” Johnson. Aun así los estudios no se rinden y siguen apostando a adaptar títulos de cuanta consola exista con el fin de pegar el pleno y tener una franquicia nueva entre las manos.
Halo es una serie de juegos sumamente exitosa, el caballito de batalla de Xbox y uno de los referentes del género de “disparos en primera persona” y estrategia en tiempo real. La saga que cuenta con dieciséis lanzamientos hasta la fecha vio la luz en noviembre del 2001, cuando se publicó el primer juego homónimo que bautizaría al resto de la franquicia.
La acción centra al jugador en el medio de una guerra intergaláctica milenaria entre los Forerunners y los alienígenas parásitos Flood. Su permanente enfrentamiento lanzó a la humanidad a los confines del universo para unirse a la resistencia. Los famosos “Halos” que dan título al juego son unas poderosas armas creadas por los Forerunners.
En el siglo XXVI los seres humanos se encuentran dispersos en distintas colonias interplanetarias, unificados bajo el gobierno del Mando Espacial de las Naciones Unidas. Las distintas revueltas civiles y la constante amenaza de un ataque externo lleva a los científicos y militares a desarrollar un programa con el fin de crear al soldado definitivo. Esta unidad de elite se bautiza Spartans, y es de donde nace el protagonista y emblema de Halo: el imponente Master Chief.
Tras distintos problemas de índole religioso entre los extraterrestres y los humanos, conseguir ser dueño de un halo significa tener una ventaja clave en la lucha, que puede transcurrir tanto en planetas exóticos como en naves espaciales.
Explicar la mitología de Halo en un par de párrafos es virtualmente imposible. La serie cuenta con expansiones en formato de antología de cuentos y novelas que superan las tres docenas de publicaciones, sumado a trece libros de historietas que fueron ampliando las distintas razas que se pueden encontrar en el universo del juego, detalles sobre las costumbres y creencias religiosas de los personajes, junto con cientos de aventuras. La popularidad de la franquicia no se debe tomar a la ligera, que ya lleva veinte años sin dar signos de agotamiento.
Los primeros intentos por llevar el juego a la pantalla se iniciaron en el 2005, con un desfile de nombres estelares conectados a diferentes proyectos. Guillermo del Toro, Neill Blomkamp, Peter Jackson, Alex Garland y hasta Ridley Scott estuvieron negociando para sumarse a diferentes adaptaciones que jamás vieron la luz. Si tuvo más suerte en Internet, cuando en el 2012 se produjo una película —dividida en episodios— titulada Halo 4: Forward Unto Dawn, dirigida por Stewart Hendler, que contentó a los fanáticos de la saga, probó que Halo puede tener una adaptación digna en formato audiovisual, y posteriormente continuó su vida en la plataforma Netflix.
Desde el 2018 un tal Steven Spielberg anunció varias veces que la serie televisiva de Halo vería la luz con la producción de Amblin Television, una subsidiaria de su empresa. Distintos problemas en diferentes estadios del proyecto (lo que se conoce en la industria como “el infierno de desarrollo”) parecían haber condenado, una vez más, la adaptación con gran presupuesto que todos los amantes de la franquicia deseaban. Incluso la pandemia puso en jaque las grabaciones de la serie. Si el universo ficticio le propone al jugador andar esquivando disparos todo el tiempo, llevar adelante una adaptación de Halo parece emular esa experiencia.
El cast se conformó con Pablo Schreiber como Master Chief y Jen Taylor como Cortana, la inteligencia artificial del juego. La actriz pega el salto desde los videojuegos en donde le otorgó su voz al mismo personaje. También se sumaron al elenco Shabana Azmi, Bookem Woodbine, Charlie Murphy y Natascha McElhone entre otros. Los directores detrás del desarrollo de la anticipada serie fueron Kyle Killen y Steve Cane, dos experimentados creadores de la pantalla chica.
Sin embargo desde que salió el primer trailer hasta recientes entrevistas de los actores y directores han dejado un rastro de dudas entre los fanáticos más acérrimos. En una declaración para el medio estadounidense Variety, Steve Cane dijo sobre la producción de esta serie:
“No miramos el juego. No hablamos sobre el juego. Hablamos de los personajes y del mundo. Por eso nunca me vi limitado por el hecho de que esto sea un videojuego.”
Esta declaración puso aún más los pelos de punta entre los fans, que lo interpretaron como una señal de desprecio hacia el material original y, por supuesto, tendrán un motivo más para odiar el producto final si no cumple con las expectativas. También se generaron controversias por el nuevo diseño de Cortana, y algo que parece haber sido la gota que rebalsó el vaso: Master Chief, que en la saga de juegos jamás se quita su icónico casco, en esta serie sí se lo va a quitar. Los fanáticos van a conocer el rostro del protagonista después de veinte años, y no están contentos. El actor protagonista ya salió a escudarse de la catarata de críticas que ya le están lloviendo aduciendo:
“Es importante ver el rostro al personaje para que los espectadores puedan conectar emocionalmente y así poder contar una historia larga. En los videojuegos se mantiene anónimo porque la idea es que el jugador sienta que es Master Chief, por eso su identidad es vaga. Pero en la serie es otro formato. Respetamos a los que quieren ver el rostro al personaje y a los que no, pero para nosotros era muy importante que la gente pueda conectar con Master Chief y eso implica mostrar su rostro.”
La serie apunta a contentar tanto a fanáticos como no iniciados en la saga, pero se sabe que los fandoms (de cualquier género) suelen ser un ambiente un poco tóxico en general. Las expectativas frente a una adaptación de un material reverenciado siempre van a ser altas, y ningún creador jamás podrá equiparar la imaginación de una persona que lleva años visualizando cómo sería su versión definitiva.
Para quien escribe, un no iniciado en el mundo de los videojuegos, los trailers ostentan una calidad visual impresionante, con acción que parece interesante y un planteo de la historia que, si bien no es original, llama lo suficientemente la atención como para darle una oportunidad a la serie.
Las controversias se resolverán o acrecentarán este jueves, cuando Halo debute en el servicio de streaming Paramount +.