Se le dice al bebedor.
Responde sin lugar a dudas a la forma tradicional de beber con la bota en casi toda España.
Inevitablemente el bebedor deberá “empinar el codo” para dejar caer el vino en la boca. Los expertos bebedores cuando la bota se encuentra llena la exprimen para que el vino salga con fuerza.
Los degustadores de vino desechan esta moda considerándola chabacana dado que e l vino no puede manejarse en el paladar tal como lo hacen los conocedores.
Del Origen de los Dichos – Editorial Selene- 1990
Sus Compañeros Empezaban a Empinar el Codo más de la Cuenta
“La noche del triunfo de Uruguay sobre Suecia en el Mundial de Brasil 1950, en San Pablo, la delegación celeste fue invitada a una fiesta de despedida organizada por funcionarios locales. Los jugadores fueron recibidos por un ejército de mozos con bandejas cargadas de vasos con whisky, bebida escocesa muy apreciada en la nación oriental. Al ver tanto ir y venir de camareros, y que sus compañeros empezaban a empinar el codo más de la cuenta, el capitán Obdulio Varela olfateó rápidamente lo que en verdad se perseguía con tanta generosidad: Debilitar a los futbolistas que, un par de días más tarde, debían jugar la final en Río de Janeiro. Varela, veloz de reflejos, se paró en medio del salón y gritó: «Señores: o se termina el whisky, o nosotros nos volvemos a Montevideo». La fiesta continuó muy bien regada, pero con dulces gaseosas y sabrosos jugos de fruta.”
Luciano Wernicke – “Historias Insólitas de los Mundiales de Fútbol”