Juego tradicional de nuestra campaña que aún se práctica y que consiste en: “Colocar en el sitio de la prueba un arco de donde pende una sortija que los jinetes deben ensartar en un puntero que llevan en la mano. Los competidores, montando buenos caballos, se dividen en dos grupos colocados a cierta distancia de uno y otro lado del arco y allí esperan la señal para dar comienzo a la corrida. Inician ésta pasando alternativamente de uno a uno por debajo del arco, haciendo picar entonces su caballo y tratado de lograr la sortija. Cuando son muchos se les suele poner brazales con número y, entonces se dividen en dos grupos de pares y nones. El perímetro en partir es el número uno, siguiéndole el del lado opuesto, o sea el dos, y así continúan alternativamente”.
La Sortija
Entretenimiento que se juega entre varios participantes, debiendo acertar uno de los mismos, a quien se le dejó entre las manos una sortija. La sortija con vaina es una variante del mismo juego pero en el que la penitencia consiste en dar al que no acierta, un golpe con la vaina de un cuchillo.
El Mayordomo
Soy Sinforiano, señores,
el paisano más mentao,
mayordomo de la estancia
más nombrada del Bragao.
Y no se crean ustedes
de que me quiera alabar,
muchacha que a mí me gusta
en ancas me la sé alzar.
Soy muy tremendo
para el hembraje
y me respeta
todo el gauchaje.
En los bailongos
no hay más que ver:
no se me escapa
ni una mujer.
No hay paisano que me gane
si se trata de domar;
al potro, por más soberbio,
como guante sé dejar.
En la taba, en las carreras,
hasta aura no me han ganao
y en la corrida ‘e sortija
cien argollas he ensartao.
Soy el paisano
más presumido
y de las mozas
el más querido.
Soy el más taura
para el amor:
soy Sinforiano,
un servidor.
Tango
Música: Ángel Villoldo
Letra: Ángel Villoldo