El síndrome de Asperger es un trastorno que se caracteriza porque la persona manifiesta intereses limitados o una preocupación inusual y obsesiva con un objeto o un tema en particular, llegando a excluir otras actividades y temas de conversación. Las personas que lo padecen suelen tener una inteligencia normal o ligeramente por encima de la media, pero muestran rutinas o rituales repetitivos, así como una tendencia a hablar de manera demasiado formal o monótona y a interpretar figuras retóricas e ironías de manera literal.
A veces su lenguaje corporal es inexistente. También exhiben un comportamiento social y emocionalmente inadecuado y se muestran incapaces de interactuar exitosamente con los demás. La torpeza física y la ausencia de empatía hacia los demás son otros rasgos característicos de la enfermedad, que se suele diagnosticar en edad escolar.
Se estima que en torno a 3 de cada 1.000 niños podrían padecer el trastorno, que es más frecuente en varones y se clasifica como un trastorno del espectro autista (TEA). Se cree que científicos como Albert Einstein o Isaac Newton, artistas como Miguel Ángel y músicos brillantes como Beethoven pudieron padecer el síndrome de Asperger.
Un Poco de historia
En el año 1944, Hans Asperger, un médico austriaco, describió un síndrome al que llamó psicopatía autista.
La descripción que realizó de dicho trastorno se refería a personas con inteligencia normal que mostraban un deterioro cualitativo de la interacción social y comportamientos extraños, sin retrasos en el desarrollo del lenguaje.Hans Asperger describía a niños con una sociabilidad disminuida por su falta de interés por las ideas, sentimientos de otras personas o por el juego de otros niños (niños solitarios, egocéntricos, que están en su mundo), o con una sociabilidad anómala porque si bien estaban interesados en relacionarse con otras personas presentaban reacciones extrañas. También presentaban alteraciones de la comunicación pero no se observaban las alteraciones gramaticales con inversión de pronombres, ecolalia, problemas en la abstracción verbal mencionados por Kanner al describir el autismo precoz. Presentaban alteraciones de la comunicación no verbal y pragmática. Presentaban un contacto ocular extraño, especialmente ausente durante los intercambios verbales, combinado con una reducción de su expresividad facial y gestos utilizados al comunicarse. Utilizaban un lenguaje pedante, lleno de tecnicismos y neologismos, usaban un lenguaje más de adultos que de niños. Tanto su aspecto como su comunicación extraña les hacían fuente de rechazo y victimización por otros niños. Además, presentaban restricciones de sus intereses con intereses únicos e intensos que dominaban sus vidas y presentaban poca flexibilidad de su juego simbólico. Preferían clasificar o hacer líneas con los juguetes a jugar con ellos. Presentaban intereses científicos en ciencias naturales, química, números, tecnología; por lo que Asperger pensaba que con sus intereses eran capaces de una gran creatividad.
Acompañamiento Terapéutico
Los niños con Asperger presentan en general una evolución favorable con el correcto acompañamiento terapéutico pueden desenvolverse relativamente bien e integrarse a una escolaridad regular y posteriormente entrar al mundo laboral, ya que en general presentan un nivel cognitivo promedio o superior y desarrollan un nivel de lenguaje con el que pueden comunicarse en un nivel más que instrumental. El A.T. es un dispositivo centrado en el yo del paciente, no obstante con un vínculo asimétrico.
El A.T. debe devenir a un lugar de Otro simbólico para el paciente (no de un semejante), que le prestara su yo, pondrá el cuerpo, pero en tanto representante de un equipo, agente terapéutico capaz de distancia y disociación de su Yo.
Las personas con asperger necesitan tiempo adicional para completar sus tareas, preparar sus materiales y saber qué hacer en las transiciones. Por ejemplo (Preparar los materiales ;Encontrar y preparar los deberes, etc.),es importante evitar las prisas, reducir o eliminar el escribir a mano, Educar en la relajación, distribuir la agenda, crear una agenda equilibrada que conserve la energía, controlar las demandas, utilizar actividades calmantes y anticipación distribuir la agenda utilizar apoyos visuales, simplificar el lenguaje, tener cuidado con la literalidad, proporcionar un tono calmado y positivo ,verbalizar las acciones, ser generoso con los premios fomenta las atribuciones y reducir la inseguridad, entre otras cosas. Es correcto mencionar que estas pueden ser distintas opciones para el abordaje terapéutico, pero el acompañamiento terapéutico no será nunca una labor aislada, está inscripta en el seno de un equipo, Lo que permite perfilar su labor clínica claramente es la pertenencia al mismo y la identificación con el esquema referencial, y pautas de trabajo.
Conclusión
Las personas con síndrome de Asperger son individuos con sentimientos, desarrollo emocional y conducta social, tienen expresiones físicas de amor, afecto y deseo. Merecen el respeto como tales, además del derecho a ser educados para lograr un desarrollo integral del individuo así como la protección de sí mismo, en un ambiente que le permita desarrollarse como un ser autónomo, a través de la adquisición de herramientas de interacción y manejo propio para ellos y para el entorno que le rodea.
En la intervención se deben tomar en cuenta las posibles implicaciones en el área emocional, la ansiedad y el manejo de ésta, la frustración y los cambios de humor, los problemas sensoriales asociados al síndrome y las estrategias de intervención en el campo educativo.
Lic. Sergio Saliche (MN 25353)
Red Asistencial de Buenos Aires – REDBA