El arrabal era un territorio poblado de personajes que no necesariamente eran marginales o delincuentes. Guapeza, coraje, valor, representan un mérito extra en cualquier ámbito. La valentía siempre fue valorada en cualquier tiempo y cultura.
Guapo – Malevo – Taita – Taura – Orillero
Tiene que ver con la guapeza y el malevaje, fue una de las características recurrentes en las letras del tango.
Decía Martín Fierro, adelantándose en décadas al compadraje orillero. Prisionero de las circunstancias, la guapeza de Fierro fue una fuerza disparada sin dirección, que lo llevó a cometer una muerte injusta, siempre sin vacilar.
Pero el guapo porteño, tenía, como los héroes mitológicos, un punto débil y secreto. Era el amor.
Jamás Tuvo Miedo ni aún Ante la Muerte Porque era muy Hombre «El Tigre Millán»
Rosita Quiroga fue de las pocas mujeres que interpretaron elegidas a la guapeza. De su voz surgió “Mandria” de Juan Velich y Francisco Brancatti.
Tome mi poncho, ¡no se aflija!
Si hasta el cuchillo
se lo presto.
Cite, que en la cancha
que usté elija
heded ir y en fija,
no podré mal gesto”
No fue el único tema que popularizo: en tiempo de milonga registró “El Taita del Barrio”, décimas que pertenecen a “Versos rantifusos”, del poeta Felipe Fernández, “Yacaré”.
Yo soy el taita del barrio,
pregúnteselo a cualquiera.
No es esta la vez primera
en que me han de conocer.
Yo vivo por San Cristóbal,
me llaman Don Juan Cabello,
anóteselo en el cuello
y ahí va, y ahí va, así me quieren ver.
Don Juan (El Taita del Barrio)
Tango – 1910
Música: Ernesto Ponzio
Letra: Ricardo Podestá
Durante los carnavales de 1928, la interprete estrenó “El Malevo”, de Julio De Caro y María Luisa Carnelli, quien firmaba Luis Mario.
“Entre guapos de acción, copaste la caban.
Te sobra corazón: sos un orre pur sang.
Perdoná el berretín, hermano… ¡Que querés!
Me ha dado el ventolín de batir de valés…
Lo tengo que decir: muñeca pa’ tallar
y labia pa’ enfrupir nunca te va a faltar,
porque sos el mejor reo de la ciudad,
canchero, arrastrador… ¡Te sobra autoridad! ”
El Malevo
Tango – 1928
Música: Julio De Caro
Letra: María Luisa Carnelli
En 1929, Juan Velich y Platas compusieron “Sangre Maleva”, tema en el cual reflejaron con nítidamente al auténtico guapo, derecho y leal.
“¡No me pregunte, agente
quien fue el hombre que me ha herido,
que será tiempo perdido,
porque no soy delator!
¡Déjeme nomas me muera
y que esto a nadie le asombre,
que el hombre para ser hombre,
no debe ser batidor!”
Francisco Canaro estrenó, en 1934, la comedia musical “La Canción de los Barrios” en el teatro Sarmiento. Uno de sus temas era “El Tigre Millán”. Lo estrenó Ernesto Farná.
Picao de viruela, bastante morocho,
encrespao el pelo lo mismo que mota
un hondo barbijo a su cara rota,
le daba un aspecto de taita matón.
De carácter hosco, bien fornido y fuerte
afrontó el peligro cual bravo titán,
jamás tuvo miedo ni aún ante la muerte
porque era muy hombre «El Tigre Millán»
El Tigre Millán
Tango 1934
Música: Francisco Canaro
Letra: Francisco Canaro
“Te Llaman Malevo” apareció en 1957 en un concurso en Radio El Mundo. Lo grabó Aníbal Troilo, con Ángel Cárdenas, y ocho años después lo repitió, con la voz de Tito Reyes.
“Nació en un barrio con malvón y luna
donde la vida suele hacer gambetas,
y desde pibe fue poniendo el hombro
y anchó al trabajo su sonrisa buena”
En 1966, Astor Piazzolla grabó una serie de milongas sobre poemas de Jorge Luis Borges. Les cantó Edmundo Rivero y fueron compiladas en una obra conceptual titulada “El Tango”, “Jacinto Chiclana” pertenece a ese disco.
Me acuerdo, fue en Balvanera,
en una noche lejana,
que alguien dejó caer el nombre
de un tal Jacinto Chiclana.
Algo se dijo también
de una esquina y un cuchillo.
Los años no dejan ver
el entrevero y el brillo.
¡Quién sabe por qué razón
me anda buscando ese nombre!
Me gustaría saber
cómo habrá sido aquel hombre.
Alto lo veo y cabal,
con el alma comedida;
capaz de no alzar la voz
y de jugarse la vida.
(Recitado)
Nadie con paso más firme
habrá pisado la tierra.
Nadie habrá habido como él
en el amor y en la guerra.
Sobre la huerta y el patio
las torres de Balvanera
y aquella muerte casual
en una esquina cualquiera.
Sólo Dios puede saber
la laya fiel de aquel hombre.
Señores, yo estoy cantando
lo que se cifra en el nombre.
Siempre el coraje es mejor.
La esperanza nunca es vana.
Vaya, pues, esta milonga
para Jacinto Chiclana.
Jacinto Chiclana
Milonga- 1965
Música: Astor Piazzolla
Letra: Jorge Luis Borges