Entre los valores orilleros, la astucia, aunque fuera cultivada con malas artes, estaba mejor vista que la honestidad, si esta traía aparejada lentitud en la supervivencia, ingenuidad u otra característica que implicara desventaja en la lucha por la vida, Es decir, si el hombre era un chabón.
“Has nacido en una escuela
de malevos, calaveras,
de vivillos y otras yerbas.
Sin embargo quien diría
Que en el circo de la vida
Siempre fuiste un gran chabón.”
Crucifica al personaje, el tango Dandy, de Demare, Irusta y Fugazot. No importa tanto la decencia, como la viveza.
Es que había otro chabón más resistido que aquel que era apenas un humilde trabajador, se trata del individuo con pretensiones de vivillo o calavera como bien grafica el tango mencionado. El adjetivo en cuestión, es la síncopa de chambón, sinónimo de torpe. El pasaje de chambón a chabón se transita por el lunfardo, ya que durante décadas, el sustantivo y calificativo circuló sólo en la jerga orillera y en las letras de tango.
Al extenderse su uso al resto del habla popular, aparecieron derivaciones como enchabonado; para referirse a quién es enredado, “embalurdado”, complicado en una situación perjudicial y no deseada. A su vez, “boncha” funciona como “vesre” de chabón, por esa costumbre porteña de invertir las sílabas; pero estamos hablando de lo mismo.
Como si el término no fuera suficiente, hay un abanico de sinónimos intercambiables con chabón: chabonardo, salame, cartón, cartonazo, pastenaca, chauchón, el más cercano “pancho” y los celebérrimos otario y gil; este último ha generado una familia propia de vocablos.
Con el paso del tiempo, se fue distorsionando el sentido original de chabón, y en el siglo XXI los más jóvenes lo utilizan como sinónimo de individuo; tipo; un sustantivo sin carga peyorativa. De la misma manera se usa para referirse a las mujeres: una chabona es una mujer, sin abrir juicio de valor.
El chabón equivalente a un salame o cartonazo, sólo sobrevive en los tangos que lo aluden.
Chabón: Pop. Chambón, tonto, inexperto, torpe, poco hábil
«Me alumbra de un modo tan lindo el solcito / que un chabón diría que para mí arde…».
Dante Linyera, ¡Semos Hermanos!
Corre ahora más frecuentemente con el significado genérico de ‘sujeto, persona innominada’.
“Guzmán le ruega al asaltante: “Dejame ir. Llevate el auto.¿Qué más querés? Yo te mato, “chabón”, insiste el ladrón, y le tira el puntazo con la aguja de tejer. Guzmán alcanza a moverse un segundo antes. La aguja le atraviesa la campera y lo lastima en el cuello.”
La Nación – 17-04-99
Sincopa del cast. chambón.
Enchabonar: entontecer, privar a uno del uso de sus facultades espirituales («Tu fueye enchabona / y reintegra paisajes de barro / y devuelve cosas».
Julián Centeya – La Musa del Barro
Chabón
Chabón, me dice Chabón
yo creí que con mi Rolex presidente
y mi anillo reluciente
iba a conquistarme con la horma del zapato
porque fue cambiando el paso
pero sin decir que no.
Me crucé con la mujer que más sabía
de las cosas que creía sobre el tema del amor
Chabón, me dice chabón.
Porque te llevo un apellido de ventaja
un Mercedes reluciente y una Visa al portador
era posible disfrutar de una aventura
pero te pusiste dura y la noche naufragó
hace bastante que no piso Recoleta
ahora paro por floresta
muy cerquita a la estación
de donde baja tu cuerpito incandescente
donde espera dócilmente
mi impaciente corazón.
Chabón; me dice Chabón
y se queja que ya es tarde, que no puede
porque está jugando adrede;
como el gato y al ratón,
chabón me dice chabón
muestra el queso desde lejos
pero al rato me desaparece el plato
y me quedo sin ración.
Me cruce con la mujer que más sabía
en las cosas que creía sobre el tema del amor
chabón, me dice chabón,
porque te llevo un apellido de ventaja
un Mercedes reluciente y una Visa al portador
era posible disfrutar de una aventura
pero te pudiste dura y la noche naufragó
hace bastante que no piso recolecta
ahora paso por Floresta
muy cerquita a la estación
pero !cuidado! porque sigo con la fiesta
porque sé que algo me resta
porque no soy tan chabón.
Letra y Música: El Negro Ayala – 2006
DEL LIBRO PERSONAJES DEL TANGO DE ROBERTO BONGIORNO