Montar escenas, buscar la mejor luz, medir, disparar, editar. Qué se yo, es todo eso y mucho más. No estudié fotografía y dudo estudiarla en algún momento. Prefiero dejarla así que fluya como lo hace. No quiero sentir presión y saber de memoria los tipos de lentes, va más allá de eso, cuando sentís que revivís con cada disparo a una flor, una persona o un lugar. Cuando en milésimas de segundos inmortalizas un momento. Cuando dejas que un recuerdo sea recordado y no lo condenas al olvido. Cuando no permitís que nada ni nadie quede en un “fue”. Porque sí, revivimos, ella, la cámara y nosotrxs, lxs que sacamos fotos, revivimos un momento que fue, pero que cada tanto, cuando indagamos en el álbum de fotos deja de conjugarse en pasado: es.
Texto y Fotos de Guadalupe Rapetti