Hallaremos conflictos de “poder” entre empleado/jefe, gobierno-sindicatos, alumnos-docentes, países, etc., donde la asimetría está acompañada por la fuerza para resolver los conflictos. La guerra es el ejemplo clásico.
“Tengo Razón”… Ya no Hablemos Más
En una discusión ¿Alguna vez dijiste o te dijeron esta frase?
Seguro que SI
En un conflicto en general hay dos partes antagónicas;
• Tengo razón y tu estas equivocado
• Quiero salir, no te doy permiso
• Los niños viven con la madre, los niños viven con el padre
Así, tenemos infinitos ejemplos de posiciones opuestas en un conflicto.
Pensemos juntos…
Ante una situación conflictiva y para poder hallar la solución debemos establecer cuál será nuestro enfoque y de acuerdo a él, decidiremos que estrategias y recursos necesitaremos.
Para Ury, Brett y Golberg[1] (1989) sostienen que existen tres posturas para buscar y abordar soluciones a los conflictos:
El enfoque cuya base es el “poder” supone ejercerlo, es decir, intentar que el otro haga algo que no haría por voluntad propia. En este enfoque están presentes los actos de agresión, sometimiento y violencia.
Cuando el enfoque se basa en la “razón” estamos pensando en códigos, leyes, reglamentos, estatutos, y otros elementos que se apoyan en las relaciones entre los sujetos y las pautas que las regulan.
Y por último, el enfoque basado en los “intereses”. Esta mirada implica hallar soluciones sustentadas por las necesidades de los protagonistas. De esta manera las partes pueden acordar buscando la mutua satisfacción (ganar-ganar). Podemos recurrir a la negociación y a la mediación como métodos alternativos de resolución de conflictos.
Hallaremos conflictos de “poder” entre empleado/jefe, gobierno-sindicatos, alumnos-docentes, países, etc., donde la asimetría está acompañada por la fuerza para resolver los conflictos. La guerra es el ejemplo clásico de disputas resuelta a través de este enfoque.
Si analizamos los conflictos pensando en la “razón” estamos planteando en el ejercicio de los derechos. El juicio es un ejemplo donde cada protagonista presenta sus argumentos y pruebas en busca de que el juez determine cual tiene la “razón”.
Cuando el enfoque son los “intereses” la mediación podría combinar la razón o argumentos, el poder de las partes para decidir que acordar fundado en sus intereses.
Reflexionando…
El enfoque a partir de los “intereses” puede lograr arribar a
• acuerdos pacíficos
• acuerdos viables
• acuerdos sostenibles en el tiempo
Acuerdos que se lograron luego de un trabajo colaborativo de los protagonistas que los satisface a ambos.
Volvamos al principio
“Tengo razón”… Ya no hablemos más
Esto no tiene sentido práctico, no arriba a acuerdos y destruye los vínculos entre los protagonistas.
Por lo tanto…transitemos por otro camino, el de la escucha, el camino para descubrir que piensa/quiere/necesita el otro, el camino para “educar para la paz”
(1) GETTING DISPUTES RESOLVED: DESIGNING SYSTEMS TO CUT THE COSTS OF CONFLICT