Personajes en el Tango
Fecha de Publicación:
El Coso y los Cosos
Es voz de uso corriente en distintos sectores sociales y edades según pasan los años: El Coso - La cosa - El cosito - Cosita Linda
El Coso y los Cosos

La voz sería de origen italiano y su auge, coincide con los picos de inmigración de ese origen; y en su país natal, también se utiliza para designar a cualquier objeto o cosa de nombre ignorado o que no se recuerda.

Evocación de Los Cosos de al Lao por Miguel Ángel Lucero 2010

Coso – Los Cosos de al Lao
Con el “coso” o la “cosa”, sucede algo similar a lo que acontece con “tipo” o “tipa”. El porteño lo utiliza para mencionar a alguien a quien no se sabe como se llama o que por alguna razón no quiere nominarlo. Algunas de esas razones puede ser cierto encono con el aludido, que obliga a tratarlo de “coso” como forma de denigrarlo, ya que ni siquiera se lo cita por el nombre. Otro motivo puede ser el anonimato del “coso”, alguien a quien se lo conoce apenas de verlo pasar, o por una vaga referencia.

“De pronto se escucha
el rumor de una orquesta;
es que están de fiesta
los cosos de al lao.”

Dice José Canet en Los Cosos De Al Lao, un tango que pinta una hermosa acuarela de una humilde fiesta en el arrabal.

La voz sería de origen italiano y su auge, coincide con los picos de inmigración de ese origen; y en su país natal, también se utiliza para designar a cualquier objeto o cosa de nombre ignorado o que no se recuerda.

Por carácter transitivo, en Buenos Aires llamamos “coso” al individuo o tipo cuyo nombre ignoramos. Pero si sabemos su nombre y no obstante le llamamos “coso”, es para equipararlo a una cosa, por algún resentimiento:

“Si cuando lucís tu talle
con ese coso del brazo
no te rompo de un tortazo
por no pegarte en la calle.”

Dice la milonga Tortazos de Razzano y Maroni, cuando el ex novio o amante despechado, sorprende a su antigua mujer del brazo de un “coso”.

Es voz de uso corriente en distintos sectores sociales y edades según pasan los años: El Coso – La cosa – El cosito – Cosita Linda.

Los Cosos de al Lao

Sollozaron los violines,
los fueyes se estremecieron,
y en la noche se perdieron
los acordes de un gotán.
Un botón que toca ronda
pa’ no quedarse dormido
y un galán que está escondido
chamuyando en un zaguán.

De pronto se escucha
el rumor de una orquesta,
es que están de fiesta
los cosos de al lao.
¡Ha vuelto la piba
que un día se fuera
cuando no tenía

quince primaveras!
¡Hoy tiene un purrete…
y lo han bautizao!
Por eso es que bailan
los cosos de al lao.

Ya las luces se apagaron,
el barrio se despereza,
la noche con su tristeza
el olivo se ha tomao.
Los obreros rumbo al yugo
como todas las mañanas,
mientras que hablando macanas
pasa un tipo encurdelao.

Tango
Música: Marcos Larrosa / José Canet
Letra: Marcos Larrosa / José Canet

Tortazos
…………………………….
Y ahora tenés vuaturé,
y un tapado petigris y
tenés un infeliz
que la chamuya en francés.
Que hacés, tres veces que hacés,
señora Ramos Lavalle,
si cuando lucís tu talle,
con ese coso del brazo,
no te rompo de un tortazo,
por no pegarte en la calle.
…………………………………..

Milonga – 1930
Letra de Razzano
Música de Maroni

Temas
Comentarios
Cancionero
Chiquilín de Bachín

Chiquilín de Bachín

A Bachin se va por dos cosas: a comer y a estar. Más que un “chelibo”, es un meridiano donde todo porteño se iguala. Es una juntada de mesas, con lomo de papel, última rinconada de la merza presidida por la sombra del Malevo Muñoz.
- Central -
Grupo Mural Nereidas R.

Grupo Mural Nereidas R.

En el año 2018 ganaron el primer premio en el concurso de muralismo “Centenario de la reforma universitaria” organizado por la Facultad de Derecho de la U.B.A. Obra que fue llevada a cabo en el hall central de la Facultad, en CABA.
Costumbres
Chocolate Jack

Chocolate Jack

Como todo objeto que se instaló fuertemente en la memoria colectiva, el Jack tiene sus fanáticos que cuentan con gran conocimiento del tema; coleccionistas de las piezas y lugares donde suelen cruzarse para intercambiar las codiciadas figuras.
Al Pie de la Letra
Esperanzas Gastadas

Esperanzas Gastadas

Mis pasos levitan y por enésima vez quisiera aferrarme a ese banco de madera, pero todo es en vano. Sacudo mi alma, mientras empaño el vidrio de la puerta de entrada de la sala de espera. Desde hace milenios busco interlocutores.
Conociendo la Cuba Literaria
Cuán Grande es el Amor

Cuán Grande es el Amor

No nos rindamos; tengamos fe y, con amor a la vida, no nos extrañe que podamos llevarnos una sorpresa... Si entendemos esto descubriremos lo grande y bella que es la vida; la riqueza que, en todo momento, cae sobre nosotros.
Columnistas
Más Artículos