Las manos caen suave y lánguidamente, se cierran sobre si mismas son tensión ni nerviosismo, apenas si alcanzaban a cruzarse tímidamente o empuñan despreocupadas el infaltable bastón.- El pintor Elbio Fernández capto las manos de Jorge Luis Borges en una pequeña oficina de la galería Witcomb, en la calle Florida 760, de Buenos Aires, cuando el poeta hablaba de tango y de Carriego.- Desde el 5 de Septiembre los trabajos de Elbio Fernández flanquean la entrada de la misma galería Witcomb, prolijamente ordenados en una exposición que se extenderá hasta pasado mañana, sábado 17.-
La idea de dibujar las manos borgianas se les ocurrió a Elbio Fernández y a Nicolás Cócaro en un mediodía porteño: para ambos es un reconocimiento “muy argentino” de su amistad hacia Jorge Luis Borges.- La exposición y el homenaje se continuaron en un libro aparecido el mismo lunes 5: mil ejemplares impresos por Francisco A. Colombo que se venden a 200 pesos.-
Los dibujos de Fernández, acompañados por textos alusivos, reúnen una sorprendente demostración de las influencias de Borges sobre una generación de escritores argentinos.- Luisa Mercedes Levinson asiste al “milagro de la transmutación o evolución cósmica de esa mano”.-
Revista Confirmado
15/09/1966
Mano a Mano