“Los Hombres del Tango Nunca me han Hecho Mal”
-Una historia que nunca contaste es que conociste Spinetta bastante antes de empezar tu carrera.
-Si, a través de Pototo, el del tema de Almendra, que era amigo de Hugo Varela, mi ex marido, y nos invitó a un asado con él. Me acuerdo de Dante en la cuna, todavía bebe, y que yo lo miraba a Luis embelesada. Para mí era el hombre de mi vida, como el Che Guevara. Hugo me miraba con una cara de ¨ ¿Y a esta que le pasa? (risas). Pero claro, no le preguntaba nada relacionado con la música.
Hablábamos de nuestros hijos, cosas simples. Me hice muy compinche de Patricia, su ex mujer.
Una mina súper.
-Años más tarde los asados continuaron ¿no?
-Sí, ya en otra casa, también con Pototo, y con otra situación económica, ya separada de Hugo y el con Dante y Cata adolescentes y con Vera llorando como una marrana en la cuna. Aquella vez yo me pelee, entre comillas, con Luis porque Dante le pedía no terminar el secundario y él se ponía loco, le salía el San Román de adentro, “Pero escúchame Luis”, le decía yo “si vos también te dedicaste a full a la música, ¿Por qué no se lo permitís a tu hijo?” “¡Pero yo termine el secundario! Que Dante también lo termine”, me contestaba, totalmente serio, Luis era así.
Tiempo Argentino – 21-04-12 por Juan Manuel Strassburger a Adriana Varela – “Los Hombres del Tango Nunca me han Hecho Mal”
Adiana Varela: “Canto como hablo, porque me expreso con las canciones”
“Empecé cantando música urbana, cercana al rock, como cosas de Fito Páez, Luis Alberto Spinetta, Litto Nebbia, Alejandro del Prado y Silvina Garré. Pero enseguida me di cuenta de que si quería reconocerme a fondo tenía que llegar al tango.”
“No me planteo esto de cantar tangos como una carrera. Porque lo único que sé es que no hacer. El resto es una conjura del azar.”
“Me di cuenta de que, siempre desde el tango, en realidad buscaba decir otras cosas. Pero recién con el tiempo me descubrí tanguera.”
“Los tangos antiguos me pegan, no los elijo yo. Son ricos en personajes. Mi generación no tuvo almaceneros ni panaderos. Además, me tientan los fraseos de esos tangos añejos, porque son atípicos en una mujer.”
“Me gusta la media voz, tan poco usada y que tiene que ver con la intimidad. Por eso no tolero el grito. Yo creo que se siente más emoción cuando se canta para adentro y no para afuera”
“Canto como hablo, porque me expreso con las canciones. En eso me identifico con Roberto Goyeneche y con Virgilio Expósito.”
“Yo no me metí con un objetivo de triunfo, sino porque me enamore del tango. Soy consciente de que me había convertido en un fenómeno, pero me baje a tiempo. Al tango hay que llevarlo suavemente desde lo musical, el resto viene después.”
“Mi primer acercamiento fue la música de Piazzolla, hasta que un día alquilé Sur, la película de Solanas y al escucharlo a Goyeneche pude sintetizar lo que me ocurría con la música.”
“El Polaco fue mi padrino, nunca me pude separa de él. Jamás se pudo analizar lo que pasaba cuando el cantaba. Era indecible, inefable. El decía: hay cantantes a patadas y artistas muy pocos. Uno es un vehículo. Por eso no quiero perder ni la coherencia ni la frescura, igual que él”