“Entre las Novedades Había uno de Rita Pavone y el de Los Beatles”
“La profunda frase conceptual le permite encontrar una anécdota de su infancia, que a esta altura oficia casi de punta de ovillo: ‘En la primaria tenía un grupo folclórico, pero apenas supe de Los Beatles le dije a mi maestro: Yo me cambio de bando y me voy a hacer rockero. Y así fue, no volví al folclore’. Su pasión por los muchachos de Liverpool tuvo una señal cuando una amiga de su madre, en el 63, llevó un disco a su casa: ‘No lo pusimos, pero me sorprendió la tapa con ellos cuatro apoyados en el balconcito (Pease, please me). Al poco tiempo fui con un compañero del colegio, Carlos Piegari (coautor de Natalio Ruiz), a una disquería que tenía cabinas para escuchar. Entre las novedades había uno de Rita Pavone y el de Los Beatles. Elegimos el de ellos y morimos. Lo compramos entre los dos y nos fuimos a su casa… Creo que puse Twist y Gritos como cinco veces seguidas. Al día siguiente me cambié el flequillo. Y más adelante le pedí a mi maestro, el periodista Julio Ricardo, un capo, que nos llevara al cine a ver Anochecer de un Día Agitado’.”
Por Silvina Lamazares a Nito Mestre – Clarín – Espectáculos – 30-05-09
“Che, Nos Tenemos que Separar”
“A veces éramos catorce viviendo en la misma casa. Con David Lebón vivimos como cuatro meses. Era el quinto Sui Generis, siempre estuvo con nosotros. Charly estaba viviendo con María Rosa (Yorio), y nosotros estábamos solteros. Si él salía con nosotros se le complicaba.
Entonces nos veíamos para ensayar y a veces ni eso: “si ya tenemos todo ensayado”. Eso contribuyó a un distanciamiento. A comienzos del 75 hicimos un Coliseo, que fue muy lindo, y después no pasó nada. Un día Charly me dice: “Che, nos tenemos que separar”. Yo también estaba aburrido. Se lo dijimos a Jorge Álvarez y él planteó algo diferente: cuatro recitales en el Teatro Astral a la mañana. Hicimos el primero y salió todo mal. Ese mismo día tomamos la decisión de separarnos. Fue mientras comíamos un asado. A Álvarez se le ocurrió lo del Luna Park. Entonces vino la mejoría antes de la muerte, como teníamos un objetivo y empezamos a vernos más para ensayar nos entusiasmamos.”
Gabriela Saidon a Nito Mestre – Clarín – Espectáculos – 05-09-05
“Charly con La Máquina… yo con Los Desconocidos de Siempre”
“Cuatro hippies van… A 3 mil pesos de entonces la entrada, con los dos shows se recaudaron 180 millones de pesos. “Nos pagaron cinco mil dólares a cada uno, que en ese momento sería mucho más que ahora. Nos duró desde setiembre del 75 hasta febrero del 76. Porque nos fuimos a vivir a un hotel, el Impala, de Libertad y Arenales. Cada uno tenía su cuarto y empezaba su historia: Charly con La máquina… yo con Los desconocidos de siempre. Y ahí se mudó la rinaldería. Todo el mundo venía todo el tiempo y nos quedamos sin nada.”
Gabriela Saidon a Nito Mestre – Clarín – Espectáculos – 05-09-05